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Hace unos años, estaba desesperada, financieramente hablando. Necesitaba cada centavo de mi ingreso mensual para pagar mis gastos de manutención y los pagos mínimos de mi deuda. En aquella época no podía hacer mucho progreso financiero al mes; aportar solo el pago mínimo de la deuda de una tarjeta de crédito de alto interés no te lleva a ninguna parte.
Encontrar formas gratuitas de hacer ejercicio
El único artículo de lujo que podía permitirme en mi presupuesto habitual era la mensualidad de mi membresía de Crossfit, mi gimnasio. Era el más caro de mi pequeña ciudad natal. Pagaba por él alrededor de $1500.00 al mes para ejercitarme; eso era aproximadamente 4% de mi salario neto mensual.
Pero por mucho que me encantara hacer Crossfit y sentir sus beneficios en mi salud, finalmente decidí que tenía que abandonarlo. Cancelar la membresía me permitió derivar esos recursos y ver progresos en la reducción de mi deuda de tarjeta de crédito.
Pero como no quería que mi salud empeorara, decidí buscar formas gratuitas de hacer ejercicio. De hecho, encontré algunas que me gustaron.
Si la membresía de un gimnasio no está dentro de tu presupuesto, pero quieres hacer ejercicio, puedes considerar cuatro de mis formas favoritas de ejercitarme sin costo:
- Clubes
- Ligas deportivas comunitarias
- Videos
- Rutinas a medida
1. Únete a un club
Una de las primeras cosas que hice para asegurarme de seguir haciendo ejercicio fue comenzar a caminar con un amigo todas las mañanas durante 30 minutos. Hacíamos una caminata rápida antes del trabajo, y de esa manera aún podía dedicar algo de tiempo por las noches a otras actividades físicas.
Muchas colonias tienen uno o varios clubes de caminatas. El grupo se suele reunir cada día para dar un paseo a la hora señalada. Averigua si hay un club de caminatas cerca de ti: en los grupos de Facebook de tu colonia o de tu ciudad, en el centro cívico de tu barrio, en el pizarrón de avisos del mercado o del deportivo público; o en el grupo de whatsapp de la escuela de tus hijos. Pero si no puedes encontrar uno ya existente, ¡puedes intentar iniciar el tuyo propio proponiendo la idea a través de los mismos canales!
2. Juega en una liga deportiva
Algunas ligas deportivas comunitarias son gratuitas y básicamente son como universidades intramuros para adultos. Pero, si hay una tarifa para unirse a una liga deportiva, por lo general es muy razonable. En mi ciudad hay equipos de basquetbol, softbol, futbol (masculino y femenino), beisbol…Si investigas en tu comunidad, estoy segura que encontrarás muchas opciones.
Si aún no tienes material deportivo, puede que tengas que comprar alguno, pero siempre puedes pedirlo prestado para probar si te gusta la práctica antes de comprarlo.
3. Recurre a Youtube
Si prefieres hacer ejercicio en tu casa por tu cuenta, puedes suscribirte a un canal de Youtube. Hay miles, con todo tipo de rutinas para ponerte en forma: crossfit, rutinas cardio, yoga, pilates, zumba, box, baile de salón, running… lo que quieras. Estos canales, además, añaden videos con tips útiles de alimentación y recomendaciones sobre ejercicios y rutinas complementarias.
Puedes crear un circuito de ejercitación con el material de varios youtubers. ¡Verás una gran diferencia!
4. Haga su propia rutina
Mi forma gratuita favorita de hacer ejercicio es inventar mi propia rutina de ejercicios en casa. Uso mucho de lo que aprendí en Crossfit y practicando deportes que recuerdo de cuando era niña. También aprovecho las cosas que ya tengo en la casa y mi propio peso corporal durante la mayor parte de mi entrenamiento. De esta manera, no tengo que comprar nada extra.
No necesitas nada más que tu propio cuerpo para hacer ejercicios como flexiones, abdominales, alguna rutina cardio y saltos. También puede usar muebles para cambiar tu rutina y hacer algunos movimientos más fáciles o más difíciles según sea necesario.
Por ejemplo, puedes usar una silla o una mesa para hacer flexiones inclinadas si no tienes la fuerza suficiente para hacerlas en el suelo. O si estás listo para un desafío mayor, pon los pies en el escalón inferior de tu porche para hacer una flexión más difícil.
Está claro que no tienes que gastar mucho dinero para mantenerte en forma y saludable. En realidad, ¡no hay que gastar ni un centavo!